Reflexiones de un alfarero imperfecto…
Centrar objetivos.
Es muy curioso pero hace tiempo, descubrí que el proceso de elaboración de un pieza guarda muchas similitudes con cualquier proyecto vital o empresarial que queramos poner en marcha. Por ese motivo decidí utilizar la alfarería para visualizar procesos, experimentar frustraciones y encontrar salidas. El coaching experiencial nos permite trasladar a los usuarios las claves del éxito a través del arte y aprender, desaprender o reaprender de la mano de la experimentación constante.
El alfarero se sienta desnudo en frente de un trozo de barro en movimiento, sus únicas armas son sus manos, su creatividad y su capacidad para sorprender.
Os mostramos la parte incial, el centrado de la pieza, fundamental para que el resto del proceso sea un éxito. Los cimientos, centrar objetivos, trazar directrices, tener un plan….¿os suena?